
Desde los atardeceres junto a la playa hasta los interiores modernos y nítidos, The Inn at Long Beach mantiene el enfoque en líneas limpias, luz natural y el encanto relajado de la costa del Golfo.
La historia visual en The Inn at Long Beach es una de facilidad y claridad. El exterior es discreto—paredes de estuco pálido, líneas simples y palmeras que se mecen suavemente más allá del estacionamiento. Al entrar, el vestíbulo establece el tono: despejado, iluminado naturalmente y casualmente costero sin ser temático.
Las fotos de las habitaciones muestran camas bien hechas, texturas suaves y un diseño que favorece la funcionalidad—televisores de pantalla plana, escritorios, mini-neveras y sillones dispuestos para maximizar el espacio. Grandes ventanas dejan entrar la luz de Misisipi, con algunas habitaciones que ofrecen vistas distantes del Golfo.
El área de desayuno es luminosa y acogedora, con mostradores limpios, una plancha de autoservicio y frutas frescas dispuestas bajo iluminación colgante. Las fotos junto a la piscina revelan un área exterior compacta pero invitadora con tumbonas, sombrillas y destellos de la línea de helados en acción.
Los huéspedes también encontrarán fotos del gimnasio, el espacio para reuniones y el camino a la playa cercano, ofreciendo una imagen completa del alcance de la propiedad y su conexión con el paisaje circundante.
Ya sea navegando antes de reservar o revisitando una estancia reciente, la galería ofrece una clara sensación de lo que se puede esperar—diseño simple, espacios tranquilos y un tramo transitable de la tranquila costa de Misisipi.
Siglos 0 a 17
